Сказка не отредактирована на испанском языке

 На русском языке: "Воскресение" http://proza.ru/2018/01/05/2018


  En una ciudad grande y hermosa, que estaba a orillas del mar, viva un rico comerciante. Todos sus antepasados tambien eran comerciantes, de lo que estaba muy orgulloso. Su fortuna era enorme. Alexander Vladimirovich, el nombre de nuestro comerciante, era dueno no solo de barcos de vapor , tiendas y casas, sino tambien de fincas con muchos campesinos que trabajaban incansablemente. Su vida fue dura, porque fueron tratados con severidad, castigandolos por la menor ofensa. No solo ellos no vieron compasion y misericordia, sino tambien a todos los empleados que trabajaron para el.

  Si, que decir alli, incluso sus conocidos y aquellos lo consideraron un despota codicioso y egoista . Y solo el propio Alexander Vladimirovich se consideraba el hombre mas inteligente, amable y dulce. Y razono asi: como soy rico y mis ingresos aumentan cada ano, entonces Dios me favorece y me ayuda en todos mis asuntos. Y los pobres son castigados por sus pecados, pereza y embriaguez. Asi vivia hasta los cuarenta anos para nadie y nunca hizo ningun bien. Aquellos a quienes engano en el trato enviaron maldiciones a su cabeza, y la gente comun rezo a Dios para librarlos de tal bestia en forma humana. La paciencia de Dios se acabo.

   Una noche, los ladrones atacaron a Alexander Vladimirovich, le rompieron la cabeza y le desnudaron. Como no habia nada de ropa en el, nadie le reconocido. Por lo tanto, un poco vivo e inconsciente lo llevaron al hospital para los pobres.
 
   Еsperando su turno, nuestro senor murio. Y su alma fue al infierno. Y no solo se fue, sino que le arrastraron los demonios al profundo en el fondo. Donde estan las almas de los muertos que no conocian la compasion o la misericordia.

   Alexander Vladimirovich era un hombre de fe. Al menos el mismo se consideraba asi. Llevaba una сruz de oro; inclinaba al pasar junto a la iglesia; i pasando pobres decia : Dios dara. Solo creyendo en Dios, rechazo por completo la existencia de demonios. Y cuando contaban historias terribles con el, se reia y llamaba despectivamente a todos los tontos densos en su oscuridad que creen en todo tipo de cuentos de hadas.
----------------------------
Y cuando alguien contaban historias terribles , se reia y llamaba despectivamente a todos guien les creian a los tontos densos en su oscuridad que creen en todo tipo de cuentos de hadas.


 Cuando una multitud de efiopes recogio su alma al salir de su cuerpo y, con un rugido y un ululus, lo arrastro hacia abajo, el comerciante se horrorizo como nunca habia experimentado.

El solloz;, rogando que lo dejara ir, pero de esto llegaron a un deleite a;n mayor y gritando: ";Eres nuestro, nuestro!" lo azotaron con un fuerte l;tigo. El dolor de esos golpes era insoportable , y el hedor que provenia de los demonios lo giraba de adentro hacia afuera. Entonces el mercader se acordo de Dios y suplico : "Senor, ayudame!"

En ese mismo instante, sus torturadores desaparecieron, como si no existieran, y Alexander Vladimirovich escuch; una voz: estoy cansado de tus iniquidades. Ahora sabes lo que mereces despu;s de morir. Vuelve y vive como un ser humano, de lo contrario volver;s a estar aqui, pero para siempre.


   Alexander Vladimirovich  recuperado la consciencia el segundo dia en la morgue. Su resurreccion hizo mucho ruido en la ciudad. Todos estaban asombrados por este milagro y sus conocidos, hablando de esta noticia, dijeron: "Qque suerte! Ha vuelto del otro mundo!" sin siquiera saber cuanto tenian razon.


 El mismo culpable de esta istoria ni siquiera dijo a sus seres queridos lo que le sucedio, para que no lo consideraran loco. Pero desde ese dia ha cambiado mas alla del reconocimiento. Se le cayo la arrogancia, como las escamas de un pez. La complacencia como una mano se quito.

 Resusitado comerciante se ha vuelto tranquilo, humilde y muy devoto. Los conocidos, al encontrarse con el en la calle, no reconocieron en este humilde /tranguilo - молчаливый/

  hombre y discreto a ese senor distante y narcisista que conocian anteriormente.

 Su actitud hacia las personas tambien ha cambiado: no hay gritos, difamacion sobre y sin castigo. Hablo con todos carinosamente, escucho cada solicitud, ayudo a los necesitados.

 En la iglesia rezaba con fervor, con reverencias. Su caridad crecio dia a dia. Dono a templos, construyo casas de Dios, abrio escuelas de artesania, pago por la educacion de los ninos campesinos en instituciones de educacion superior e incluso en el extranjero. Pero todo le parecia poco. Se despertaba por la noche con un sudor frio y rezaba a Dios hasta la manana para que le diera mas tiempo para arrepentirse.


 Su angustia mental se volvi; insoportable por el hecho de que ahora ve;a a la gente sumida en sus pecados. ;l abri; sus ojos a la forma en que la gente huye del bien en busca de placer. Tratando de tomar m;s de la vida, nadie piensa que la vida se da no para el placer, sino para prepararse para la vida eterna.

 Mantener su alma inmaculada, capaz de estar con Dios despu;s de la muerte, porque la fealdad no puede estar cerca de la belleza, el odio con amor, el orgullo con humildad. Para que el hombre pueda decir ante Dios: Se;or, has preparado para m; lo que el ojo no ha visto y el o;do no ha o;do, t; me has estado esperando, y yo he hecho todo lo posible para ser digno de Ti-

Hice todo lo posible para no decepcionarte, para no ofenderte y para no empujar tu mano que me extiendes con tanto amor.


Han pasado varios a;os. Alexander Vladimirovich no solo con palabras, sino tambi;n con sus acciones trat; de llevar a sus amigos a la verdadera fe. Trat; de mostrar cu;nto el diablo se apoder; de sus corazones y los apart; de la caridad. Habl; de Dios, conden; los vicios, llam; al bien, mencion; las necesidades m;s urgentes de la ciudad. Pero permanecieron impenetrables. Algunos se deshicieron de ;l con bromas, otros simplemente giraron un dedo en la sien. Al ver que sus palabras ca;an en el vac;o de sus corazones, como en un pozo profundo, sin el m;s m;nimo chapoteo, se call;: no puedes cruzar el trasero con un l;tigo ...

La caridad le tom; mucho tiempo a Alexander Vladimirovich, y ;l quer;a que nada lo distrayera de la oraci;n. Y entonces decidi; repartir toda su fortuna. Todo, excepto la herencia, fue vendido y entregado a los necesitados.
 As; que lleg; el ;ltimo d;a, ma;ana saldr; de esta casa a la calle, asumiendo la haza;a de la locura. Una enorme carga cay; de los hombros de Alexander Vladimirovich. No dud; ni un minuto de que hab;a hecho lo correcto.

 Golpearon. De alguna manera, un campesino entr; un campecino continuamente inclin;ndose: la mujer esta enferma, necesita una operaci;n y no hay dinero. Hay siete ihos en la casa. Aprend; de amigos que aqu; pueden ayudar. Aqu; est;s.

- ";Cari;o ! Llegas tarde, ahora soy tan pobre como t;. Pero se me ocurrir; algo. Tengo hijos. Ellos ayudar;n. Nos vemos ma;ana por la noche en la entrada de esta casa".
 Pero ni la noche del d;a siguiente ni una semana despu;s, el comerciante pudo encontrar la cantidad necesaria. Los ni;os se indignaron enormemente: - " ;ya nos has dejado pobres!"Los familiares le dieron la espalda hace mucho tiempo, consider;ndolo un loco. Los amigos tampoco ten;an la cantidad necesaria. Entonces el comerciante record; que ten;a un amigo de la infancia que era m;dico y ten;a una gran pr;ctica en la ciudad. Hace tiempo que no se ven, pero Alexander Vladimirovich no dud; en que ayudar;a. Entonces le dijo al hombre:

- No necesitamos dinero. Le preguntar; a mi amigo y ;l har; la cirug;a gratis.

 Pero el amigo dijo: - "Cuando repartiste tu capital, te Olvidaste de tu viejo amigo, y ahora te acuerdas de la necesidad".

 - Pero ya eres rico, ;verdad ?!

 - ;Y t; no cuentas mi dinero! Si trato gratis, tendr; que ir con la mano extendida.

Llorando amargamente, nuestro comerciante camin; por el terrapl;n. Su coraz;n estaba desgarrado de dolor: ";Cu;n ciegos y sordos sois, hombres! Vuestros corazones est;n cerrados a la Palabra de Dios. El Se;or dijo: "al ver no ven, y al o;r no oyen, y no entienden; y se cumple sobre ellos la profec;a de Isa;as, que dice: con o;do oir;is, y no entender;is, y mirar;is con los ojos, y no ver;is; porque el coraz;n de estos hombres se ha endurecido, y con los o;dos apenas oyen, y sus ojos han cerrado; no vean con los ojos, ni oigan con los o;dos, ni comprendan con el coraz;n, y no se conviertan, para que yo los sane."

Incluso nuestros hermanos m;s peque;os y aquellos probablemente responder;an al escuchar mi petici;n.
 Descendiendo por los escalones hasta la misma agua exclam;:

 ";O;dme, peces del mar! Mis palabras se dirigen a vosotros. Ustedes tambi;n son criaturas de Dios, y por lo tanto entienden su Palabra. Y tan pronto como lo dijo, una gran cantidad de peces se acercaron a la orilla y todos mantuvieron sus cabezas sobre el agua, mirando su rostro con atenci;n.

- El Se;or orden;: "Vestid al desnudo, recibid al extra;o, alimentad al hambriento, Bebed al sediento, visitad al enfermo". Una vez le dieron a nuestro Se;or Jesucristo una moneda para pagar, porque ;l, como pobre, no ten;a nada que pagar. Hoy, una vez m;s, teneis la oportunidad de ayudar a los necesitados y, por lo tanto, servir al Se;or".

Los peces que se acercaron a la orilla y escucharon su discurso, se asentiron la cabeza, y luego todos se hundieron a la vez. No tard; mucho en esperar. El agua azul se oscureci; repentinamente por el n;mero de peces: peque;os , medianos , grandes y en la boca de cada moneda, anillo, pulsera, perla. Todo lo que guardaba el mar y lo que estaba oculto a los ojos de los hombres estaba a los pies del comerciante. Por su rostro corr;an l;grimas de gratitud: ;Gloria a Ti, Se;or! ;Gloria a tu fuerza, Se;or! Y ahora y siempre y por los siglos de los siglos. ;Am;n!



  Георгиевна